La presión arterial se refiere a la presión que la sangre aplica a las paredes internas de las arterias. Las arterias transportan sangre desde el corazón a otros órganos y partes del cuerpo. "Hipertensión" es el término médico para la presión arterial alta.
La presión arterial alta no tratada aumenta la tensión en el corazón y las arterias, lo que eventualmente causa daño a los órganos. La presión arterial alta aumenta el riesgo de insuficiencia cardíaca, ataque cardíaco (infarto de miocardio), accidente cerebrovascular e insuficiencia renal.
Cuando su médico o enfermera le indiquen su presión arterial, dirán 2 números. Por ejemplo, su médico podría decir que su presión arterial es "130 sobre 80". El número superior (presión arterial sistólica) es la presión dentro de las arterias cuando el corazón se contrae. El número inferior (presión arterial diastólica) es la presión dentro de las arterias cuando el corazón está relajado.
La presión arterial normal: número superior (presión arterial sistólica) de 119 o menos y número inferior (presión arterial diastólica) de 79 o inferior.
El diagnóstico de hipertensión arterial (presión arterial alta) se establece con cifras de presión sistólica mayor a 140 mmHg y/o diastólica >90 mmHg, en caso de corroborar las cifras alteradas en >2 ocasiones en diferentes días, se debe iniciar tratamiento con fármacos.
Si le han recetado un medicamento para la presión arterial, lo más importante que puede hacer es tomarlo. Si causa efectos secundarios, no deje de tomarlo. En su lugar, es posible que se pueda reducir su dosis o cambiarlo a otro medicamento. Si el costo es un problema, menciónelo también. Es posible que se pueda recetar un medicamento menos costoso. Tomar su medicamento para la presión arterial puede evitar que sufra un ataque al corazón o un derrame cerebral, ¡y puede salvarle la vida!
Aunque la causa exacta de la hipertensión sigue sin estar clara, se han identificado varios factores de riesgo. Su riesgo es mayor si usted:
Es un adulto mayor (el riesgo aumenta con la edad avanzada)
Tener obesidad
Tener antecedentes familiares de hipertensión (es decir, parientes que tuvieron o tienen presión arterial alta)
Consume mucho sodio (sal) en su dieta
Beber mucho alcohol
Ser sedentario
Usted tiene mucho control sobre su presión arterial. Para ayudar a disminuir su presión, usted puede:
Bajar de peso (si tiene sobrepeso)
Elegir una dieta baja en grasas, rica en frutas, verduras y productos lácteos bajos en grasas
Reduzca la cantidad de sal (sodio) que come
Haga algo activo durante al menos 30 minutos al día la mayoría de los días de la semana
Reduzca la cantidad de alcohol que bebe (si bebe más de 2 bebidas alcohólicas por día)
También es una buena idea conseguir un medidor de presión arterial en casa. Las personas que controlan su propia presión arterial en casa obtienen mejores resultados y, a veces, incluso pueden reducir la cantidad de medicamentos que toman.